Todos los años la misma pregunta: ¿Qué abrigo me compro? «Necesito uno que me abrigo pero tampoco quiero ir como el muñeco Michelín. Este puede que sea una de las inversiones más importantes en cuanto a nuestro a fondo de armario se refiere. Y no porque nos debamos gasta más dinero, sino porque el abrigo perfecto debe reunir una serie de características que no son nada fáciles de cumplir.
-Conseguir el color que te haga súper looks.
Notas de estilo: No puede ser ni muy claro ni muy oscuro, de esta manera, conseguirás aprovechar más la temporada de frío. Porque aunque a partir de marzo estemos deseosas de no volver a ponernos un abrigo, ¿cuántos junios te has visto a 10ºC…? De esta manera podrás combinar todos los looks de nueva temporada con un abrigo que no contraste en exceso. Te proponemos el cámel como el mejor de los básicos
-El material: Cálido y confortable
Nota de estilo: Es cierto que en este caso solo podrás discrepar si donde vives es un lugar donde llueve mucho, aunque con un paraguas todo se arregla. Elige tejidos que aporten calidez como la lana merino, la alpaca o el paño. Si su composición es cien por cien estarás comprando el mejor aliado contra el frío. Además añadirás elegancia sin darte cuenta. Elegimos un diseño con capucha con un toque de piel para poder contrarrestar el viento y la lluvia.
-¿Qué forma elegir?. Olvídate ya de las cazadoras
Nota de estilo: Aquí si que lo tenemos claro. Si no quieres que las bajas temperaturas puedan contigo, apuesta por los largos, verás que en el momento que te cubra más allá de la cadera la sensación térmica cambiará notablemente. Y, si lo que te preocupa es el volumen, es el abrigo perfecto si lo que quieres es estilizar tu looks de invierno. Cruzado, con un acabo más oscuro o extra large, tu decides.